Las pequeñas y medianas empresas que se dedican a proveer materiales y servicios a las operaciones mineras están contra las cuerdas, pues la paralización de operaciones en minas como Las Bambas (Apurímac) y Antapaccay (Cusco) ha ocasionado que se registren pérdidas por más de US$100 millones.
El reporte de pérdidas proviene de la Asociación de Contratistas Mineros del Perú (Acomipe) y considera el impacto que varias empresas de distintas regiones han registrado desde diciembre por actividades vinculadas a operaciones en explotación, servicios en plantas de tratamiento, venta de insumos y alquileres y comercialización de maquinarias y equipos.
El gerente general de Acomipe, Carlos Bernal, explicó a Perú21 que las pérdidas corresponden a cerca de un centenar de empresas de todo tamaño que han visto afectadas sus actividades al no poder llegar o entrar a las operaciones mineras o que han visto disminuidos los requerimientos que usualmente recibían.
“Al suspenderse actividades, las empresas contratistas ven retrasados sus pagos porque se les paga hasta donde ejecutaron operaciones y quedan en stand by para continuar. Cuando se pone a andar una operación se tienen objetivos, las liquidaciones son mensuales y la paralización también objeta esos objetivos. Hay más de 100 empresas contratistas afectadas de diferentes modos, no todas están con contratos paralizados”, señaló Bernal.
Un ejemplo de esta situación es que las empresas contratistas reduzcan en 30% la compra de maquinarias debido a que no pueden transportar los insumos y materiales hasta los campamentos mineros.
EMPLEOS AFECTADOS
Las paralizaciones y afectación que sienten los proveedores también generan preocupación respecto al futuro del empleo.
“Son más de 10 mil empleos directos que podrían estar en riesgo porque en el momento que las actividades se paralicen totalmente los trabajadores perderán sus trabajos”, alertó.
Una muestra de ello es que, solo en el caso de la región Ayacucho, existen más de 50,000 plazas laborales que están relacionadas con la minería, y ello hace que el impacto del sector se estime en 200 mil personas si se incluyen a las familias de los
trabajadores.
PAGO DE OBLIGACIONES
Esta situación también ha ocasionado que estas empresas vean disminuida su facturación y que a su vez tengan problemas de pagos con su personal, proveedores e incluso sus créditos.
“La banca ha estado ofreciendo alternativas porque sus clientes, las empresas contratistas, no pueden cumplir con todas sus obligaciones y están ofreciendo algunas salidas”, comentó Bernal.
En ese contexto resaltó que cualquier problema que se observe por parte de alguna empresa contratista “no es porque no quiera cumplir, sino porque los eventos ocurridos han hecho que sus operaciones se vean afectadas”.
TENGA EN CUENTA
La minería permite crear dos millones de puestos de trabajo directos e indirectos a nivel nacional, según la Confederación Nacional de Instituciones Empresariales Privadas (Confiep).
Solo la mina Las Bambas sostiene contratos con más de 50 empresas proveedoras.