Criterios. Especialistas e involucrados en el proyecto cuprífero de Southern en el valle del Tambo analizan la posibilidad del destrabe de Tía María, a raíz del respaldo del ministro Rómulo Mucho, pese a los cuestionamientos de los ciudadanos arequipeños.
“Tía María sería un punto de inflexión”
Víctor Gobitz, presidente de la SNMPE
Evitemos la dicotomía. No es que agua sí u oro no, o si Tía María va o no va. Puedo estar equivocado, pero en mi contexto son inversiones formales y fiscalizadas que generan progreso.
Tía María y la industria minera han reflexionado sobre el rol de la inversión, que debe ir de cerca al entorno donde opera no solo trayendo propuestas de valor para la Sunat o el MEF, sino también del territorio.
Es un proyecto cercano al valle del Tambo y podría tener otro nivel de productividad con una regulación del agua. Tía María puede traer soluciones y otros conocimientos para la población joven, no solo agrario, sino de metal mecánica y actividades que son externalidades positivas. Bienes intangibles.
Tía María sería un punto de inflexión para transmitir las bondades del proyecto para todos. Quienes integran el Gobierno conocen el sector y la academia. Creo que sí pueden lograr trasmitir los mensajes de conciliación.
El proyecto es de lixiviación, diseñado para evitar cualquier fuga del agua. Intrínsecamente, se evitará el contacto de los químicos con cualquier cuerpo de agua. La discusión se puede reabrir.
“Dina Boluarte tiene que honrar su palabra”
Miguel Meza, vocero de agricultores del Valle del Tambo
En 2009 hubo una consulta popular y el rechazo fue rotundo, de más del 97%. Lamentablemente, se creó un conflicto que hasta muertes generó. Son provocaciones lo que ha dicho el ministro de Energía y Minas, Rómulo Mucho. Hasta se advierte de un posible conflicto de interés. Nos ha molestado.
A la fecha, no ha habido ningún acercamiento del Gobierno ni de Southern. Parece que hemos vivido a espaldas del Gobierno. Cuando era candidata a la vicepresidencia, la presidenta Dina Boluarte firmó un compromiso en su visita a nuestra tierra y dijo que no iba a ir Tía María. Tiene que honrar su palabra.
Hay una firmeza. En zonas como Punta de Bombón y Deán Valdivia llevamos una lucha inteligente, y sin salir a las calles izamos banderas verdes en las que dice “agro sí, mina no” y “no al proyecto Tía María”.
Se debe respetar la voluntad popular. El valle del Tambo produce de todo. Desde papas, cebollas hasta camotes y aceitunas. Ahora estamos en pleno desarrollo del arroz. Es un valle muy rico, e incluso en pandemia apoyamos a regiones como Puno, abasteciéndolas.
No queremos que estalle un conflicto. Nadie quiere un enfrentamiento.
“Se va a generar una situación de conflictividad”
José de Echave, investigador de CooperAcción
No es un buen mensaje. Alan García lo intentó en 2011; Humala aprobó el Estudio de Impacto Ambiental y Vizcarra, la licencia de construcción. Ninguno pudo por el rechazo absoluto de la población del valle del Tambo. Es poco prudente insistir con un proyecto tan rechazado.
Si el Gobierno busca concretarlo, va a generar una situación de conflictividad social en una zona tan importante como el sur, que anida la mayor producción de cobre. Sería hasta contraproducente para el resto de mineras de la zona.
Southern aún no desarrolla ningún proceso de reclamo ni arbitraje internacional. Están esperando a ver si hay alguna posibilidad que se desarrolle. No es que Tía María sea un megaproyecto como Las Bambas, Cerro Verde o Quellaveco, ya que tiene una inversión de menos de US$2 millones, pero para Southern lo debe ser por su cercanía a la costa y por tener costos de producción muy bajos.
El EIA planteó la desalinización del agua, aunque los cuestionamientos de la población siguieron: el temor de que la zona se vuelva una de expansión minera. Islay es la provincia más concesionada de Arequipa.
“No podemos forzar un proyecto sin licencia social”
Iván Prado, gerente regional de Energía y Minas Gore-Aqp
Somos conscientes de que, como Gobierno regional, cumplir el artículo 4 de la ley de Gobiernos regionales: promover la inversión pública y privada en el marco de sus jurisdicciones para, entre otras cosas, mejorar la calidad de vida de su población.
La posición que tenemos es que no podemos forzar un proyecto que no cuenta con licencia social. Este tema es muy complejo y controvertido.
Tía María tiene instrumentos de gestión ambiental: el Estudio de Impacto Ambiental para etapa de explotación y beneficio de 2014, pero que no está vigente, así como el de expediente del proyecto de concesión de beneficio para la empresa (Southern), mas no para la exploración y explotación del proyecto.
Southern no está tramitando estas autorizaciones. La Dirección General de Minería, brazo derecho del Minem, cumple con el principio de legalidad; y nosotros, como Gobierno Regional de Arequipa, estamos a favor de las inversiones, pero tiene que ser con licencia social para evitar conflictos, y en el peor escenario, muertes de pobladores. Entendemos la política sectorial, pero sin licencia no.