Tras 14 de años de paralización por la oposición social, Southern Perú señaló que es momento de destrabar el proyecto minero Tía María (Arequipa) para dar una señal de confianza en las inversiones en medio de la recesión económica.
Según el Banco Central de Reserva del Perú (BCRP), la inversión minera en el país caerá este 2023 un 18% y el próximo año volverá a hacerlo en -7.7%. Con esto, se registrará tres años consecutivos de retroceso (en el 2022 retrocedió 5.5%).
Así que para impulsar el sector minero y la reactivación económica, Raúl Jacob, vicepresidente de Finanzas y CFO Southern Perú Copper Corporation,refirió que Tía María tiene todos los permisos vigentes y están listos para empezar con la obra, pero requiere llegar a consensos con la población.
El proyecto de US$ 1,400 millones, localizado en el desierto La Joya, cuya área de influencia abarca el Valle del Tambo y los distritos de Cocachacra, Mejía y Dean Valdivia, en la provincia arequipeña de Islay, espera alcanzar una producción anual de 120,000 toneladas de cobre.
“Estamos listos para realizar las inversiones, tenemos todos los recursos y permisos. Lo que queremos es que el proyecto ya vaya adelante. Sin duda sería una buena señal (su destrabe) porque mostraría que el Perú está regresando a los mercados internacionales de inversiones mineras con un proyecto que indebidamente ha sido paralizado”, indicó Jacob a Gestión.
Sin convicción del Gobierno
El representante de Southern Perú Copper Corporation mencionó que el Gobierno de la presidenta Dina Boluarte “no tiene convicción en avanzar con el proyecto”.
“Eso es algo que se nota porque no lo nombran en ningún caso. Al contrario, mencionan proyectos que tienen mucho más trabajo por delante y Tía María es una oportunidad grande para el Perú, pero no tiene mayor apoyo del Gobierno nacional”, precisó.
Aunque aún hay oposición de ciertos grupos, Jacob señaló que se viene avanzado desde el punto de vista social, debido a que realizan trabajos bastante consistentes con la población del Valle del Tambo.
“Se han reducido de manera sustancial (los conflictos). La compañía está trabajando con decenas de organizaciones de agricultores en la zona y creo que es un hecho muy positivo que la empresa siga adelante con este trabajo y haya un respaldo”, anotó.
El experto en minas resaltó que Southern está dispuesto a la construcción de la represa, para sacar adelante proyecto minero. De lograrse esa iniciativa requerirá una inversión mucho mayor que el presupuesto de US$ 100 millones previsto para la planta desalinizadora.
“Habría que ver en qué condiciones, pero sí apoyaríamos ese esfuerzo. El proyecto irá adelante y estamos trabajando en esa dirección, no hay una fecha específica, pero vemos que se ha dado un gran avance, por esa razón creemos que estamos cerca de iniciar en un momento la construcción”, remarcó.
Jacob explicó que este proyecto fomentaría la creación de 9,000 empleos durante su construcción y esto ayudará a dinamizar la zona.
Récord de producción de cobre
Más allá de Tía María, Raúl Jacob comentó que Southern trabaja en otros dos proyectos de cobre: Chancas (Apurímac) y Michiquillay (Cajamarca).
“Con estos tres proyectos, se tendrían más o menos unas 400,000 toneladas de cobre al año. Con ello, Southern más que duplicaría su producción actual y el Perú excedería los 3 millones de toneladas de cobre anual”, afirmó.
Adelantó que con los Chancas se tuvo algunas dificultades hace un poco más de un año, debido a una intervención de mineros ilegales, pero se está solucionando y se espera seguir con el proyecto. “En eso se está avanzando. Habría que terminar el estudio de impacto ambiental que es la siguiente etapa, para luego su construcción”, dijo.
En tanto, en Michiquillay se está en etapa de exploración y, por lo tanto, tomará un poco más de tiempo, aseveró. “Pero, tenemos a la fecha 14,000 muestras de depósito que están siendo analizadas en laboratorios y están dando resultados en línea con lo que esperamos”, expresó.
Mejoraría la calificación crediticia
Para Víctor Gobitz, presidente de la Sociedad Nacional de Minería, Petróleo y Energía (SNMPE), Tía María es un proyecto que tiene toda la capacidad financiera por parte de la empresa del grupo mexicano y que ya es “momento que salga”.
“Todos reconocemos que tenemos que lograr reconciliarnos. Si uno va a un diálogo maduro sin anteponer ideología, uno se da cuenta que es un proyecto con todos los controles ambientales, que genera una infraestructura pública con reservorios de agua que beneficiarán al entorno donde operan, y brindará empleo”, declaró.
Además, dejó en claro que la empresa privada requiere del Gobierno es un respaldo para que esos espacios de diálogo se den y se logre esa conciliación.
“El Estado tiene que llegar a ese espacio de diálogo y no hablar solamente de inversión o aporte de la producción. que puede ser 120,000 toneladas de cobre adicionales al año, sino el impacto para el entorno de operación”, añadió.
Ante ese panorama, Gobitz refirió que reiniciar la inversión en el proyecto en Tía María tiene un efecto hasta en la calificación crediticia del país.
“Lograr un acuerdo va a permitir ponerle una nota positiva y esa mejor calificación crediticia trae como efecto en toda la economía: menores tasas de interés para tomar un crédito”, consideró.