La empresa canadiense Rio2 ha anunciado que su subsidiaria chilena, Fenix Gold, ha recibido los permisos sectoriales necesarios para iniciar la construcción de su Proyecto Fenix Gold en la Región de Atacama.

En un comunicado, Rio2 detalló que estos permisos abarcan: 1) Métodos de Minería; 2) Planta de Proceso; 3) Botaderos de Desechos y Pilas; y 4) Plan de Cierre. Estas autorizaciones representan el último paso gubernamental requerido para comenzar la fase de construcción y posterior operación de la Mina de Oro Fenix.

Andrew Cox, presidente y director ejecutivo de Rio2, celebró la obtención de estos permisos, resaltando el esfuerzo del equipo de Fenix Gold. «Estos avances nos permitirán completar el financiamiento necesario para la construcción de la mina, y anticipamos generar valor rápidamente para nuestros accionistas con el inicio de la construcción previsto para noviembre de este año», comentó.

Además, la empresa ha anunciado que presentará un informe técnico independiente titulado “Informe técnico NI 43-101 sobre el estudio de viabilidad del proyecto Fenix Gold”, con fecha del 16 de octubre de 2023. Para ello, Rio2 ha estado colaborando con su asesor financiero, Endeavour Financial, para encontrar la mejor solución de financiamiento para el proyecto.

Rio2 ha recibido varias propuestas de financiamiento de interesados, las cuales están siendo evaluadas por la gerencia y el directorio de la compañía. Se están llevando a cabo procesos de debida diligencia con algunas de estas fuentes y se brindarán más actualizaciones en el futuro.

El proyecto Fenix Gold se posiciona como uno de los mayores proyectos de lixiviación en pilas de óxido de oro no desarrollados en América, con un recurso mineral medido e indicado de 4,8 millones de onzas de oro. La empresa confía en que su desarrollo tendrá un impacto positivo en la Región de Atacama y en Chile en general.

Este proyecto representa un ejemplo de minería moderna, integrando consideraciones técnicas, ambientales y sociales desde sus etapas iniciales. Además, implica una inversión de aproximadamente US$235 millones por parte de una empresa minera junior, generando empleo para al menos 1,200 personas durante la construcción y 800 durante la operación, que se prevé dure 17 años.