El presidente del directorio de Petroperú, Alejandro Narváez, aseguró que el año 2025 será crucial para la petrolera estatal, con el objetivo de empezar a generar ganancias y recuperar terreno perdido como parte de una profunda reestructuración financiera y de ajustes en la gestión empresarial. “Petroperú cerrará este año con menores pérdidas de las proyectadas. El 2025 será un excelente año para la empresa. Vamos a mostrar cifras en azul, esa es nuestra proyección”, indicó en una entrevista con TvPerú.
Narváez destacó que, para finales de este año, la pérdida proyectada de 960 millones de dólares se reducirá a aproximadamente 100 millones de dólares. “Eso ya es una ganancia. En 2025 tendremos una utilidad neta equivalente al 15% de la facturación. El próximo año será muy positivo para Petroperú”, afirmó.
El presidente de Petroperú explicó que la empresa ha enfrentado una profunda crisis financiera, heredada de períodos anteriores. “Ahora tenemos un equipo técnico al frente con una hoja de ruta clara y vamos a perseverar en ella”, señaló. Rechazó los discursos negativos que aseguraban que la empresa estaba en quiebra técnica, calificándolos de distorsionados e interesados.
Narváez subrayó que comentarios sobre la falta de valor de Petroperú, que afectaron el precio de los bonos en los mercados internacionales, fueron irresponsables. “Decir que la empresa no vale nada podía causar una caída en los precios de los bonos y afectar la rentabilidad, y eso es grave”, expresó, recordando que Petroperú es una empresa que tiene presencia en los mercados financieros internacionales y la Bolsa de Valores de Lima.
En cuanto a la cuota de mercado de la empresa, Narváez recordó que en 2005 Petroperú tenía el 53% del mercado, pero este año solo alcanza el 25%. “Ese resultado refleja que alguien hizo mal su trabajo, aunque cobraron muy bien”, lamentó. Para el cierre del presente ejercicio, la empresa planea incrementar su cuota de mercado al 28% y proyecta llegar al 35% en 2025.
Narváez destacó que Petroperú factura anualmente unos 4,500 millones de dólares y, con la proyección para 2025, espera superar los 4,800 millones. “Nuestro objetivo es llegar a una utilidad neta de 20% de esa facturación, lo que se destinará al tesoro público, además de los impuestos y el empleo generado por la empresa”, explicó.
En su intervención, Narváez también hizo hincapié en el rol crucial que juega Petroperú en el abastecimiento de combustibles en áreas donde la empresa privada no tiene presencia, como Yurimaguas, Tarapoto e Iquitos. “El Estado llega allí a través de Petroperú, que tiene un rol subsidiario que la empresa privada no tiene interés en asumir debido a que no es rentable”, agregó.
El presidente de Petroperú también presentó una serie de acciones inmediatas que se están implementando para recuperar el terreno perdido. “Uno de nuestros primeros objetivos es recuperar a los clientes que hemos perdido, especialmente en sectores como las compañías mineras. Además, estamos trabajando en la optimización de costos y en la mejora de la eficiencia operativa”, detalló.
Sobre la situación financiera de la empresa, Narváez reconoció que Petroperú enfrenta problemas de liquidez y, para resolverlos, están en conversaciones con entidades financieras para establecer alianzas estratégicas. “Petroperú no es cualquier empresa, es una generadora de ingresos y somos un cliente importante para las entidades financieras”, afirmó.
En cuanto al mercado de combustibles en el país, Narváez planteó una preocupación por la disparidad de precios entre distritos. “Es increíble que en zonas como Villa El Salvador o Comas el galón de gasolina cueste 15 o 16 soles, mientras que en zonas más exclusivas como San Isidro o Miraflores se venda a 22 soles”, alertó, sugiriendo que podría haber un abuso del mercado. En este sentido, llamó a Indecopi y Osinergmin a investigar la situación, ya que considera que es un tema anómalo.
Finalmente, Narváez destacó que una vez que Petroperú logre una cuota de mercado significativa, como el 30%, podrá jugar un rol regulador en el mercado, ayudando a reducir los precios de los combustibles. “Nuestros combustibles son más baratos, de mejor calidad y mayor rendimiento, ya que se refinan en Conchán e Iquitos”, concluyó, reafirmando que la empresa pública tiene como objetivo maximizar sus utilidades mientras participa en un mercado de libre competencia.