El regulador medioambiental chileno SMA dijo el jueves que había ordenado a Antofagasta (LON: ANTO) la aplicación de siete medidas para controlar los riesgos relacionados con el rescate de hidrocarburos.
Las acciones solicitadas se producen tras el colapso de una plataforma el mes pasado en el proyecto de infraestructura INCO de la minera, que incluye una planta desalinizadora y una tubería de agua para Los Pelambres.
La SMA dijo que las medidas están destinadas a prevenir los riesgos asociados a la fuga de hidrocarburos de los equipos sumergidos.
Incluyen la creación de centros de rescate de la fauna marina, la modelación de la pluma de hidrocarburos y/o petróleo, la evaluación de las áreas de mayor sensibilidad ambiental a lo largo del litoral y la ejecución de monitoreos “extraordinarios” de aves y mamíferos.
Las medidas de vigilancia y monitoreo extraordinario deberán mantenerse y no se permitirá la reanudación de los trabajos de construcción hasta la recuperación total de las sustancias y estructuras que representen riesgos para el medio ambiente.
Antofagasta señaló en junio que la ampliación en curso de su emblemática explotación de Los Pelambres costaría 2,200 millones de dólares, frente a la estimación anterior de 1,700 millones.
La cifra revisada representa un aumento del 30% respecto a los costes estimados en 2021 y un salto del 70% respecto a la estimación original de 1,300 millones de dólares.
La ampliación de Los Pelambres añadirá 60,000 toneladas de cobre al año durante los primeros 15 años a la producción global de la empresa. El rendimiento de la planta aumentará de 175,000 toneladas de mineral al día a una media de 190,000 toneladas diarias.
Reuters