La Comisión de Energía y Minas del Congreso aprobó un dictamen de ley que dispone extender los plazos de los contratos petroleros, que hasta ahora rigen por un lapso máximo de 30 años, hasta los 40 años.

Para el efecto, con 11 votos a favor y uno en contra, ese grupo de trabajo aprobó el dictamen denominado Ley que Reactiva las Inversiones en la Industria Nacional de Hidrocarburos para fortalecer la Producción Nacional en un contexto de alza internacional de precios.

El dictamen aprobado, (que ahora deberá ser sometido a votación en el pleno), modifica el artículo 22 de la Ley Orgánica de Hidrocarburos, para homologar los plazos de exploración y de explotación, o (sólo) de explotación de hidrocarburo (que hoy duran hasta 30 años), con los de los contratos de gas natural, que tienen una duración de hasta 40 años.

Se aplicará también a contratos vigentes

El autor del proyecto, el congresista Carlos Alva (AP), indicó que esta ley -de ser aprobada en el pleno y promulgada- se aplicará no sólo a los nuevos contratos, sino a los que actualmente están vigentes, de forma que sus titulares podrán solicitar una extensión de sus contratos por diez años (hasta llegar en total a los 40 años).

Pero, la aprobación de esta extensión del plazo -que deberá aplicar Perupetro S.A.- no será automática, sino que, anotó, estará sujeta a que el concesionario presente un programa de inversiones a dicha agencia estatal.

Incluirá negociaciones directas de Perupetro

Durante el debate, la comisión acordó incorporar al predictamen, una propuesta del congresista Jorge Morante (FP), de forma que, adicionalmente a la exigencia de un programa de inversiones (para extender los plazos de contratos vigentes), se incorpore también los resultados de negociaciones directas que sostenga Perupetro con el contratista, u otros aspectos que determine esa agencia.

Esto último era necesario incorporarlo, indicó Morante, en vista de las diferencias que existen entre los lotes petroleros, según su ubicación, pues la configuración geológica que tienen algunos en la costa norte, no son los mismos de otros en alta mar, o en la Amazonía.

Regalías

Otro cambio que introdujo este dictamen a la Ley Orgánica de Hidrocarburos (LOH), es que autoriza a Perupetro a retener los hidrocarburos que produzca el contratista, hasta que esa empresa no haya pagado las regalías que le corresponden aportar por la explotación del área.

Tal retención corresponderá en volumen, al equivalente al valor de la regalía que no hay sido pagada, más los intereses generados, y que se considerará como pago en especies, de forma que Perupetro lo podrá comercializar para convertir el recurso en ingreso efectivo para el Estado.

Reconocen falta de incentivos

La necesidad de hacer estos cambios en la ley antes mencionada se da, según el sustento del predictamen, en vista que el marco legal vigente no ha generado los incentivos necesarios para reactivar las inversiones en el sector hidrocarburos.

Se cita por ejemplo del resultado de esa falta de inversiones, que en mayo último, la producción petrolera cayó a su nivel más bajo en lo que va del año en curso (cerca de 37,000 barriles en promedio diario).

Se corrije un error en LOH

Para el experto en hidrocarburos Carlos Gonzáles, el dictamen aprobado corrige un error que se introdujo en la Ley Orgánica de Hidrocarburos (LOH) en el año 1987, al disponerse entonces que sólo los contratos de gas tuvieran una extensión de 40 años.

Esa diferenciación de plazos según actividad de explotación (petróleo o gas), anotó, hizo inviable que un mismo operador de instalaciones petroleras, pudiera a su vez explotar gas natural no asociado, si es que éste era encontrado en esa misma área bajo su concesión, sino que este último recurso tendría que ser explotado por otro operador, lo cual consideró técnicamente inviable.

Llegaría a destiempo

Para el ex presidente de Petroperú, César Gutiérrez, la aprobación de este cambio a la LOH llega a destiempo, pues cuando se propuso años atrás, fue con el fin de que se aplicara a los lotes del noroeste, que tenían los plazos de contratos más próximos a vencer.

El objetivo entonces, era evitar que las inversiones, y por consiguiente el ritmo de producción petrolera decayeran, pues es conocido que cuando los plazos están próximos a vencer, ya no se producen inversiones por el corto periodo que resta para recuperarlas.

Pero, recordó Gutiérrez, ya esos contratos, en su mayoría o se han dados a Petroperú el último año (como los lotes I, VI y Z-69,, o ya han sido licitados (lote X) con la condición de que en ellos tenga participación la petrolera estatal.