En un mundo donde el oro alcanza cotizaciones récord casi a diario, se esperaría que las mineras más grandes del globo, como Newmont Corp. y Barrick Gold Corp., estuvieran disfrutando de un período dorado de prosperidad sin precedentes. Sin embargo, la realidad para estos gigantes de la industria ha sido sorprendentemente diferente, marcando un contraste agudo entre el valor creciente del metal precioso y el desempeño de sus acciones en el mercado.
El Desafío de Mantenerse al Ritmo del Oro
A pesar de que el oro ha visto un incremento de alrededor del 13% este año, estableciendo un nuevo récord de $2,330.50 por onza, las acciones de Newmont Corp. cayeron aproximadamente un 6% hasta el cierre del mercado de este jueves, mientras que las de su rival, Barrick Gold Corp., disminuyeron cerca de un 2%. Este fenómeno ha desconcertado a expertos y analistas financieros, quienes nunca habían presenciado una desconexión de tal magnitud entre el valor del oro y el desempeño bursátil de las principales compañías mineras.
La Expansión y sus Desafíos
En años recientes, tanto Newmont como Barrick han emprendido frenéticas campañas de adquisiciones, buscando consolidar su dominio en el sector y convertirse en el hogar obvio para inversores interesados en el oro. Esta estrategia, aunque lógica en su búsqueda de escala y eficiencia, ha venido acompañada de desafíos significativos, especialmente en lo referente a los costos operativos. La inflación, el aumento en el costo de mano de obra, equipos y materiales han mermado los márgenes de ganancia de estas empresas.
La Perspectiva de los Inversionistas
El escepticismo de los accionistas ha crecido, particularmente hacia Newmont tras su adquisición de $15 mil millones de Newcrest Mining Ltd., una operación que se espera entregue una producción de oro menor a la anticipada. La preocupación radica en si los movimientos estratégicos de la empresa realmente se traducirán en valor a largo plazo para los inversores o si se repetirán los errores del pasado.
Un Rayo de Esperanza
No obstante, el panorama no es del todo sombrío. Desde el 1 de marzo, las acciones de las mayores productoras de oro han visto un aumento del 26%, con Newmont y Barrick cerrando a precios más altos de manera consecutiva durante más de una semana. Este repunte puede ser indicativo de una adaptación exitosa a las presiones inflacionarias y una señal alentadora para el sector.
La Inflación: De Viento en Contra a Viento a Favor
Según expertos, la reciente tendencia alcista sugiere que las presiones inflacionarias, que durante tanto tiempo jugaron en contra de las mineras, podrían estar comenzando a amainar. Si las empresas pueden demostrar una mejora en los costos en los próximos informes de ganancias, podrían realinearse más estrechamente con el mercado del oro spot, transformando los desafíos actuales en ventajas estratégicas para el futuro.