Aluminum Corp. of China, conocida como Chinalco, está considerando una inversión en el proyecto minero Tampakan, ubicado en la isla de Mindanao, Filipinas. Este proyecto es considerado la mina de oro y cobre más grande del país, con una capacidad de producción anual de 375,000 toneladas de cobre y 360,000 onzas de oro en concentrado durante un periodo de 17 años. Si la inversión se concreta, Chinalco podría adquirir una participación valorada en aproximadamente $2,000 millones en Indophil Resources Phils. Inc., empresa propietaria de Sagittarius Mines Inc., responsable del desarrollo del proyecto.

Chinalco, la principal productora estatal de aluminio en China, busca expandir su presencia global en la minería, una estrategia que le permitiría asegurar el suministro de materias primas esenciales para la economía china, la mayor consumidora de commodities a nivel mundial. Actualmente, la empresa tiene inversiones en minas de países como Guinea y Perú, y su interés en Tampakan forma parte de un esfuerzo global por aumentar la producción de cobre, un metal crucial para la transición energética y la expansión de los centros de datos.

El presidente de Filipinas, Ferdinand Marcos Jr., ha expresado su intención de revitalizar la industria minera del país, apoyando proyectos como Tampakan para impulsar el crecimiento económico. Desde su descubrimiento hace tres décadas, la mina ha enfrentado numerosos desafíos, incluyendo la salida de Glencore Plc en 2015 y problemas regulatorios como la prohibición de la minería a cielo abierto, que fue levantada en 2021. Con el incremento en la demanda global de cobre, especialmente por su uso en tecnologías verdes, la reactivación de este proyecto se vuelve crucial.

La posible participación de Chinalco en Tampakan también plantea riesgos, especialmente debido a las tensiones geopolíticas entre China y Filipinas, exacerbadas por disputas territoriales en el Mar del Sur de China. Sin embargo, de concretarse, la inversión ofrecería una estabilidad financiera significativa al proyecto y podría asegurar un comprador para parte de la producción de la mina.

La familia Sy, una de las más acaudaladas de Filipinas y accionista mayoritaria del proyecto Tampakan, podría considerar la inversión de Chinalco como una oportunidad para acelerar el desarrollo de la mina. A pesar de esto, un portavoz de la familia ha minimizado los rumores, señalando que las conversaciones aún no son definitivas.

En la industria minera global, se observa una tendencia hacia la expansión de la producción de cobre debido a su papel central en la transición energética y la creciente demanda de infraestructura digital. Aunque los precios del cobre alcanzaron niveles récord en mayo pasado, posteriormente retrocedieron debido a la debilidad económica en China. A largo plazo, se prevé un déficit de cobre impulsado por el aumento del consumo y la dificultad para encontrar nuevas minas de gran escala.

Con su capacidad de producción y el posible respaldo de un gigante como Chinalco, el proyecto Tampakan podría posicionarse como un actor clave en el mercado global de cobre, siempre y cuando logre superar los desafíos regulatorios y geopolíticos.