La empresa de calificación crediticia Moody’s Investors Service dijo el jueves que había cambiado su perspectiva para la industria mundial de los metales y la minería de estable a negativa, ya que la desaceleración económica mundial sigue suavizando la demanda.
La desaceleración está afectando a los precios, lo que en consecuencia refleja una rentabilidad decreciente para las mayores empresas del sector calificadas por Moody’s durante los próximos 12 meses, dijo la firma.
“[El EBITDA y los precios] seguirán siendo más altos que en los años anteriores a la pandemia, pero por debajo de los niveles récord observados a principios de 2022”, dice la vicepresidenta senior de Moody’s, Barbara Mattos.
Las ganancias antes de intereses, impuestos, depreciación y amortización (EBITDA) disminuirán significativamente para los productores de metales básicos, incluyendo el cobre, el níquel, el aluminio y el zinc, dijeron los expertos en investigación financiera de Moody’s.
Moody’s espera que los mineros del cobre se enfrenten a descensos del EBITDA debido a los menores volúmenes de producción en algunas regiones, el aumento de los costes de los insumos y el descenso de los precios. Al mismo tiempo, los bajos niveles de inventario y los problemas de suministro en las principales regiones productoras de cobre, como Chile y Perú, limitarán la caída de los precios del cobre, afirma.
Los productores de aluminio serán los más perjudicados, ya que los precios del aluminio han descendido drásticamente desde los recientes máximos históricos, mientras que los costes de la energía y de las principales materias primas siguen siendo elevados, especialmente en Europa. Esta combinación reducirá los márgenes y los beneficios de las empresas, afirma Moody’s.
Aunque el oro suele considerarse una cobertura contra la inflación, la agencia señala que los precios tanto del metal amarillo como de la plata están bajando debido a la subida de los tipos de interés y al fortalecimiento del dólar estadounidense. A diferencia de otros metales, el sentimiento del mercado, más que los fundamentos como la oferta y la demanda, influye en la fijación de precios en esta industria, lo que afectará negativamente al EBITDA de las mineras de metales preciosos.
El informe de hoy sigue a otro publicado por Moody’s a principios de septiembre, en el que rebajaba sus hipótesis de precios a 12 meses para determinados metales y materias primas mineras.