En los últimos años ha crecido el interés de las compañías mineras en buscar litio, ya que es un insumo para la fabricación de baterías de autos eléctricos. Si este producto se masifica, será una revolución a nivel global.
Esto ha convertido a Puno en la región con más petitorios mineros, luego de que en el 2017 la minera canadiense Macusani Yellowcake descubriera un gran yacimiento de litio en una zona cercana a la frontera con Bolivia (el yacimiento luego pasó a manos de las también canadiense American Lithium).
Puno lidera el ranking regional de petitorios mineros en este 2022 (662 petitorios), por encima de Arequipa (596), Áncash (464) y La Libertad (423), según el último reporte del Instituto Geológico, Minero y Metalúrgico (Ingemmet), con datos al 5 de setiembre.
“Puno es la región que genera más interés pues hay una fiebre por el litio, sobre todo entre las mineras extranjeras. Pero ya todas las zonas identificadas con potencial están solicitadas”, señaló Henry Luna, presidente del Consejo Directivo del Ingemmet.
Es por ello que esta institución va a realizar estudios de prospección para identificar nuevas zonas con potencial de litio en Cusco, en un área fronteriza con Puno, anunció Luna. “Estos estudios toman en promedio unos cinco años, pero esperamos tener los primeros resultados en un menor plazo”, agregó.
Las compañías con mayores petitorios mineros en el año son extranjeras. En los cinco primeros lugares se ubican Teck (Canadá), Vale (Brasil), Anglo American (Inglaterra) y Río Tinto (Inglaterra).
Por su parte Miguel Cardozo, directivo del Instituto de Ingenieros de Minas del Perú, refirió que el país aún se encuentra en una fase exploratoria del litio, por lo que llegar a su explotación aún tomará algunos años más.
“Desde el descubrimiento de un yacimiento hasta completar todo el proceso para su explotación toma en promedio unos diez años. En litio las exploraciones más antiguas en Perú tienen unos cinco a seis años, entonces aún hay un margen de tiempo para que inicie la explotación”, explicó.
Si bien el mayor interés en Puno está en el litio, también hay búsqueda de uranio y oro. “Al prohibirse la minería de oro en Madre de Dios, varios mineros han migrado y presentan más petitorios en Puno y Cusco”, indicó Luna.
Panorama nacional
Los datos hasta setiembre muestran que ya se han registrado 5,116 petitorios mineros este año en todo el Perú, por lo que Ingemmet estima que a este ritmo al cierre del 2022 se podrían superar los 5,969 petitorios del 2021. Además del litio, predomina el interés por la búsqueda de oro, cobre y hierro.
Para Cardozo, si bien el avance de petitorios mineros resulta saludable, solo constituye un primer paso en el largo camino hacia concretar actividades de exploración y explotación.
Así, refiere que en Perú la normativa traba la obtención de permisos de exploración. “Mientras en otros países toma en promedio tres meses el obtener esos permisos, en Perú es un año y medio, y si se requiere hacer consulta previa, el tiempo adicional es mucho mayor”, sostiene.
En enero y julio la inversión en exploración minera alcanza los US$ 226 millones. Cardoso refiere que ahora el Perú concentra el 3.9% de la inversión en exploración minera mundial, cuando hace unos años llegó a alcanzar el 7% de la inversión global. Esto es una muestra del efecto de las trabas regulatorias en el sector, subraya.
El dato: Ingemmet registra un acumulado histórico de 47,420 petitorios mineros a nivel nacional en una extensión de 19.4 millones de hectáreas. El 87% de los pedidos es para la búsqueda de elementos metálicos, y el 13% de no metálicos.