Se detectaron nuevas grietas en el suelo cerca de un socavón en torno a una mina de cobre propiedad de la canadiense Lundin Mining Corp. en Chile, pero la empresa dijo el jueves que las grietas no están relacionadas con el socavón ni con la actividad minera.
El descubrimiento en la región de Atacama, en el norte de Chile, ha llamado la atención sobre la árida región mientras las autoridades investigan las posibles causas.
“Las grietas detectadas en terrenos cercanos a la mina Alcaparrosa son un incidente no relacionado con el socavón y subrayamos que no hay operaciones mineras subterráneas ni comunidades pobladas en la zona cercana”, dijo en un comunicado la empresa minera Ojos del Salado, una división de Lundin.
“El origen de su formación está actualmente en estudio”, añadió la empresa.
El regulador ambiental chileno SMA ordenó esta semana medidas “urgentes y transitorias” mientras avanzan las investigaciones sobre el origen del socavón de 36,5 metros de diámetro en el municipio de Tierra Amarilla, a unos 665 kilómetros al norte de la capital chilena.
El gobierno ha manifestado su intención de imponer duras sanciones a los responsables del socavón, sugiriendo que podría estar relacionado con la sobreexplotación minera.
Lundin posee el 80% de la propiedad, mientras que el 20% restante está en manos de las japonesas Sumitomo Metal Mining y Sumitomo Corporation.
Reuters