Albemarle, el mayor productor de litio del mundo, anunció un agresivo plan de recorte de costos, el segundo en lo que va del año, debido a la caída de los precios del litio. La empresa, que sufrió una pérdida neta de $188.2 millones en el segundo trimestre de 2024, enfrenta un entorno desafiante marcado por un exceso de oferta de litio proveniente de China y una desaceleración en la adopción de vehículos eléctricos (EV), factores que han impactado negativamente los precios del litio.

La compañía, con sede en Charlotte, Carolina del Norte, ha experimentado una caída significativa en el precio del litio, desde un promedio de $20 por kilogramo a finales del año pasado hasta un rango actual de aproximadamente $12 a $15 por kilogramo. Esta reducción ha llevado a Albemarle a replantear sus estrategias operativas y de costos para mantenerse competitiva en un mercado cada vez más complicado.

Medidas de Austeridad y Planes Futuros

El director ejecutivo de Albemarle, Kent Masters, ha señalado que la empresa está llevando a cabo una revisión exhaustiva de su estructura de costos y operaciones, un proceso que se espera concluya en octubre de este año. Entre las medidas contempladas se incluye la pausa en la construcción de una unidad de procesamiento en Australia y la suspensión de la producción en una segunda unidad en el mismo sitio. Estas acciones forman parte de un esfuerzo más amplio para ajustar la capacidad de la empresa a las condiciones del mercado, lo que podría implicar despidos adicionales y la venta de activos no estratégicos.

A pesar de las dificultades actuales, Masters destacó la importancia de mantener el dividendo de la empresa, que ha sido incrementado anualmente durante los últimos 30 años. “Es importante para nuestros accionistas. Por lo tanto, nuestro plan es mantenerlo”, afirmó Masters, subrayando que esta es una de las pocas áreas que no está bajo revisión en el actual proceso de reducción de costos.

Impacto en el Mercado y Perspectivas

La reacción del mercado ante estos anuncios ha sido notable, con una caída del 2.9% en las acciones de Albemarle, situándose en $91 en las operaciones posteriores al cierre del mercado. Sin embargo, Albemarle ha mantenido su previsión de ganancias para el año, en parte gracias a los resultados positivos de su división de catalizadores y los ahorros derivados de las medidas de reducción de costos implementadas hasta la fecha, que superan los $150 millones.

El sector del litio ha experimentado una volatilidad significativa en el último año, con un desajuste entre la oferta y la demanda que ha llevado a una reducción de precios y a una revaluación de las expectativas a largo plazo para la transición energética. Analistas de Goldman Sachs, por ejemplo, no anticipan que la demanda global de litio supere a la oferta hasta el año 2030.

A pesar de este panorama, Albemarle y otros actores del mercado del litio siguen siendo optimistas respecto al crecimiento de la demanda a medida que los vehículos eléctricos se vuelvan más comunes en la segunda mitad de la década. Sin embargo, la compañía enfrenta el desafío de navegar por un periodo de precios bajos prolongados, lo que requerirá una continua adaptación y eficiencia operativa para mantener su posición en la industria.